Pero qué bien comenzamos el fin de semana. Esta mañana tenía muchas cosas que hacer, entre otras, ponerme la vacuna de los seis meses. ¡Sí! el otro día los cumplí, y lo celebré yendo a la pediatra. Me dijo que sigo en mi línea, hecho un pollino. Literalmente usó estas palabras: "Vaya seis meses que tiene Guillermo". Me pesó (8,005 gr.) y me midió (70cm), todo un tío. Y me dijo que ya puedo comer papillas de verduras y yogur (un asco), con lo que me gusta a mí la leche.
Lo que os iba a contar, que me he ido por los "cerros de Úbeda", es que mi querido padre nos ha dejado encerrados a "cal y canto" y se ha ido a Madrid. El tío ha cerrado la puerta y se ha llevado sus llaves y las de mi madre. Yo que tenía planes para el Macrobotellón de la fiesta de la primavera después de ponerme la vacuna, claro. Hace un día espléndido y lo único que puedo hacer es asomarme al balcón. Se está jugando el regalo del día del padre.
Bueno, y dejando el mal rollo para otro rato, os voy a enseñar una foto de mi nuevo juguete. Como podéis ver cuando estoy montado en él flipo en colores. Me encanta, tita Asun.
Os dejo, que tengo que jugar un rato antes de merendar. Besitos de chocolate.
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