jueves, 19 de mayo de 2011

Ya digo "ma-ma"

No sé qué tienen de especial esas dos sílabas, más cuando llevo un mes diciendo "pa-pa", haciendo el "ba-ba", y otras cuantas cosillas más. Pues eso, que llevo desde ayer diciendo "ma-ma" y mi madre está loquita. Tanto que esta mañana me ha dicho: Guillermo, vamos a hacer unas magdalenillas. 


Y claro, a mí me ha tocado batir los huevos (por mi juego de muñeca). El caso es que me ha gustado el trajín que hemos liado en la cocina. Además, con el día tan malo que ha hecho, tampoco teníamos muchas más opciones. Y al final, no nos han quedado demasiado mal, a ver qué opináis:


!a mí se me iban los ojosssssssss!


en esta foto se ven bien mis dientecillos, ¿eh?


Y cambiando de tema, aprovecho para darle las gracias a unas compis de la UEM de papá (Pili, Mayte e Irma) que me han regalado este conjuntito que me sienta tan bien. Ahí van unas fotos:


por delante, con chupe y sin chupe

y por detrás


Y nada más, a ver si mañana sale el sol y puedo salir a darme un paseo.



  





lunes, 16 de mayo de 2011

Romería de San Isidro

¡Menudo mes de mayo que llevamos!

Primero las Fiestas, luego el cumple de mamá y del tito Jorge


luego la vacuna de los 7 meses, con tres días de fiebre que para mi madre y para mí se quedan,



y ayer la romería de San Isidro. No nos perdemos ni una. Lo pasé de lujo; jugando con los primos, con los mayores,

en el columpio, etc.

(Abuelo, que si quieres hacerme un columpio en el huerto, que me lo hagas, que no quiero que te quedes con las ganas de verme reír a carcajadas)


Al final acabé hecho polvo. Pero ¿qué queréis?, un día de estos acaba con todas las energías de un bebé como yo, que aunque esté rollizo las pilas también se me agotan.




Eso sí, soy capaz de recargarlas con una buena siesta.


Ah, ¡que ya gateo!, como un gusano, pero no veáis cómo me cunde. Y a todos los que me preguntáis por el peso, ya estoy en los 10 kilillos, voy a ver si me pongo con la operación bikini que no quiero que me salgan los michelines cuando me ponga el bañador.

Besos y hasta pronto.

jueves, 5 de mayo de 2011

Lunes y Martes

El lunes hizo un día malísimo, todo el día lloviendo, de manera que por la mañana no salió la procesión y por la tarde salió, pero los papeles se pasaron por agua, y hubo que cancelarlos y bajar a marcha rápida a la iglesia.

Hasta los diablillos iban con paraguas, je je je. Por cierto, que el año que viene éste va a ser mi traje, porque el abuelo va a hacer el papel de Luzbel y yo iré de suplente. Lo que no sé yo es si podré tirar del tridente, uf, lo que voy a tener que comer de aquí hasta el año que viene...


Ésta es una foto de la Virgen, es la única que conseguí hacer porque había mucha gente 

El martes salieron las dos procesiones. Por la tarde subimos a Capallón a ver los papeles y las niñas que bailaron. Y nada más, estuvimos en plan familiar con los titos y amigos.


Y ya hasta el año que viene, a ver si no llueve y las podemos disfrutar mejor.

Ahora a hacer las maletas y para casa, que cuando llegue no voy a reconocer mi cuna

me meto en la maleta para que no se olviden de mí

  



Domingo de Fiestas

Aparte de ser el día del cerro fue también el día de la madre, y ¿qué mejor regalo que unas sonrisas para la mía? Bueno, como soy tan detallista le regalé un carrito para su pulsera



Pues nada que a las 8:30 am ya me tenían en pie. Y es que la procesión sale muy temprano y como no iba a subir al cerro, pues qué menos que acompañar a la Virgen hasta la Erilla Empedrá.


El día amaneció con una niebla intensa y parecía que se iba a aclarar el día, pero todo lo contrario. Hizo un día malo malísimo. Arriba hizo muchísimo frío, tanto que mucha gente subió y bajó antes de comer. Mi padre no. Él aguantó como manda la tradición.

Nosotros nos quedamos en el pueblo hasta que llegó la hora de la procesión de bajada. Y allí estaba yo, vestido otra vez de moro. No me hizo mucha gracia que me despertaran de mi siesta para ponerme el trajecillo, pero a ver quién le hacía la contra a mi madre en su día...


Y al final hizo buena tarde, salió el sol y todo. 


Ya en la plaza hicimos unas fotos y nos quedamos a ver los papeles. Bueno, nos subimos al piso de la abuela, para poder verlos mejor.


Aquí estoy con los primos. La foto deja mucho que desear, pero es que el primo Fernando y yo no teníamos ganas de estar sentados sino de dar bandazos con las capas. Estábamos los cuatro requeteguapos, ¿o no?







Sábado de Fiestas

Después de estar toda la semana preparando las fiestas, por fin llegó el día. No me dejaron salir con la caja, porque todavía no puedo comer chucherías, pero el año que viene no me lo pienso perder ni un día.

A lo que íbamos, que el sábado nos levantamos tempranico para arreglarnos. Me pusieron el traje de moro que me han hecho la tita Rocío y la abuela. No sabéis qué bien me quedaba, como un guante.

con la abuela

A las 12 nos fuimos a la iglesia para subir al Camarín a ver a la Virgen. Había muchísima gente, niños, las casetas del turrón, globos de Bob Esponja... una locura. Lo malo fue que al terminar la misa se puso a llover, así que tuvimos que pillar las de Villadiego, y subirnos a comer unos pinchitos (yo mi potito, claro)


Por la tarde estuvo lloviendo así que poco pudimos hacer, y por la noche fuimos al concierto porque cantaba el abuelo, aunque tampoco es que aguantara yo mucho.