miércoles, 15 de febrero de 2012

Ola de frío

Jolín con la ola de frío, es que no se va ni a la de tres. Aquí en Granada no hay quien aguante y es peor todavía si nos vamos a Zújar. Intentamos salir en cuanto vemos unos rayos de sol, ganas no nos faltan, pero es que es un suicidio salir a la calle.


Casi no podía sacar las manos para comerme los gusanitos. Me lo pensé un rato, pero al final ganó la gula y acabé con ellos. La idea era subir a la romería de San Cecilio, pero el frío nos hizo cambiar de opinión y quedarnos en la mitad del camino tomando el solecito.

Buscando alternativas, a mis padres se les ocurrió llevarme al Parque de las Ciencias, que es mi sitio preferido, cada vez que voy me lo paso en grande. 


Eché de menos las explicaciones del tito Ramón, que hubiera disfrutado de lo lindo dándomelas. ¡Tito, a ver si vienes a hacerme una visita y te llevo al Parque!


Si es que hasta se puede uno sentar a tener una charla con su padre ¡qué formal estoy!



Entre semana no ha habido grandes salidas, bueno ni grandes ni chicas, es que no ha habido. De manera que hemos tenido que inventar unos cuantos juegos para distraerme. El que más me divierte: poner orden en la cocina. Ya lo sabéis, todo un clásico.


Contenta tengo a la vecina de abajo. Tanto que ya ni nos saluda cuando nos la cruzamos en el ascensor. Pero es que el sonido de las cacerolas, tapas y sartenes en el suelo de la cocina es muy inspirador. Ni piano, ni flauta, ni guitarra, ni ná. Las cacerolas son mi instrumento preferido.


Este fin de semana nos fuimos a Zújar, ¿en qué estarían pensando mis padres? Llegamos a los -10º C. ¡Qué frío! si es que se me saltaban las lágrimas cada vez que salíamos a la calle. La única salida que hicimos medio en condiciones fue el sábado a las cuatro de la tarde cuando aún había sol, pero duró poco la tregua que nos dio el frío y nos fuimos rápidamente a encerrarnos en casa de la tita Rocío, que es la más calentita.

Y nada, que la "ola" se resiste a dejarnos. Estos dos días otra vez bajo cero y otra vez sin salir por las tardes. Así que aquí me tenéis inventando 


Parezco el Capitán Pescanova, jeje. Este es el chubasquero que me regalaron los titos de Sevilla, pero como no llueve pues no lo he podido estrenar. Cada vez que lo veo en el armario me entran unas ganas de ponérmelo... y hoy con la excusa de que no me voy a disfrazar para Carnaval pues me lo he puesto.

Sí, habéis oído bien. No voy a poder ir a mi fiesta de Carnaval, que por qué, pues porque el jueves nos vamos al "I Encuentro Nacional de los Primos! Lo vamos a celebrar en Madrid y voy a ir en tren. Prometo contar todos los detalles cuando vuelva, o casi todos. 









No hay comentarios:

Publicar un comentario